A estas horas de la noche, no te preocupes mi tienda nunca cierra, se lo que buscas, llueve, las estrellas se han ocultado de tu camino y el ambiente es cálido comparado con tu interior, disfruta de esta infusión mientras escuchamos en silencio algo que guardaba para una ocasión semejante.
poema desamor 1-100
La luna se mostraba impetuosa, iluminada en los cielos
Mis pasos me llevaban a ninguna parte, donde por primera vez te bese
Aun recuerdo tus cabellos entre mis delgados dedos, nos reíamos del ayer,
No pensábamos, no temíamos, no soñábamos ni codiciábamos
Todos esos besos dulces que se volvieron en este otro tiempo acidez,
Prometí a mi orgullo no enamorarme de ti
Pero como no hacerlo, como olvidar esa fragancia esa paz que en ti sentí,
Tu mirada calmaba mis pesadillas
Tus labios la medicina que curaban las heridas de un alma mancillada
Mi corazón intento alcanzar el ritmo del tuyo, pero no se sabía la canción
Nada de eso importaba, disfrutamos el momento, el torpe baile, todo era emoción
Luego como siempre me aplasto la realidad, estaba solo, murió la imaginación
Con ella el niño, el poeta, el amante, renació en mí el eterno perdedor
Que camina ciego en un infierno a oscuras, ardiente, frio, aterrador
El infierno es la distancia entre tu y yo,
Me bebo las lagrimas aguanto el dolor
Grito en medio de una plaza donde nadie me responde,
Donde van los corazones tranquilamente y a solas pueden morir,
Mis lamentaciones son las flores de un nicho
Que no tendrá nombre ni ofrenda al buen Dios
Tu recuerdo será la única vela, que el tiempo se encargara de apagar
Mientras yo suspiro imaginándote compartiendo
Un último baile más
No hay comentarios:
Publicar un comentario